Zaragoza 2014, frente a centro abortista

Concentración realizada en Zaragoza el día 28 de diciembre de 2014, junto con otros grupos y otras asociaciones provida, frente al centro de tortura, exterminación y desaparición de bebés no nacidos "Actur".

Por activa o por pasiva, nuestros políticos vienen demostrando desde hace mucho tiempo que no hacen absolutamente nada para limitar el espantoso y aberrante negocio del aborto, salvo, algunos de ellos tratar de seguir sacando rédito político de sus engaños.

Lamentablemente vemos cómo el espantoso holocausto del aborto se ha convertido en algo ‘Intocable’, algo, como dirían algunas: ‘sagrado’. Y sagrado más precisa y especialmente para todos esos políticos cómplices o tolerantes de la corrupción que más sangra al ciudadano medio español y que contribuyen a que las injusticias sean cada vez mayores.

En todas las comunidades autónomas, los sobres de consentimiento informado que de acuerdo a la ley del aborto de Bibana Aído deberían de ser entregados a las madres que solicitan abortar, para proporcionarles información sobre lo que es realmente masacrar a un bebé no nacido con el aborto y para darles alternativas al mismo, no ofrecen solución alguna y ni tan siquiera informan de las terribles consecuencias físicas y psicológicas que acarrea el aborto provocado... y menos aún, muestran imágenes del aborto, tal como hacen las cajetillas de cigarrillos alertando sobre diversas enfermedades y graves problemas de salud derivados del consumo de tabaco. Por eso, aún con una ley de aborto ¿cómo van a ser libres muchas mujeres si ni tan siquiera se les informa cómo es realmente el aborto ni se les ofrece verdadera ayuda sino que se les ofrece el aborto fácilmente en medio de una situación de dificultad?

 En este escenario, los gobiernos locales de los principales partidos siguen pagando con el dinero de todos los ciudadanos los abortos cometidos. (En este sentido, animamos a realizar la objeción de conciencia fiscal en la declaración del IRPF). Y no sólo eso, sino que además los partidos que nos gobiernan se dedican a fomentar la exportación del aborto a Hispanoamérica mientras se olvidan de invertir en buenas campañas de educación pública que promuevan una justicia auténtica y que eviten los embarazos a destiempo, amén de elaborar leyes que protejan a los débiles y que castiguen a los que engañan a las mujeres así como a quienes ejercen la más grave de todas las intolerancias: la intolerancia contra el derecho a la vida
 

Y dado que España es aún un país mayoritariamente cristiano, creemos que este hecho es una verdadera anomalía política que demuestra que España no tiene una verdadero sistema democrático que respete los prinicpios básicos o innegociables para que una democracia sea tal, sino un país sometido a un sistema dictatorial y manipulador con fachada democrática, que engaña y traiciona a sus ciudadanos mientras da generosa cabida en su sistema a los políticos más corruptos, inmorales y oportunistas.

Por ello si las personas y las entidades pro-vida trabajan centrando sus esperanzas únicamente en la voluntad de los políticos, mucho nos tememos que jamás se conseguirá la abolición de la ley del aborto en nuestro país.

Creemos que más bien debemos actuar y responder mostrando la llana verdad ante esta enorme y aberrante injusticia.

Una democracia sometida a las reglas del juego de quienes corrompen el mundo y fomentan el genocidio del aborto y todo tipo de aberraciones antifamiliares, jamás brindará el espacio para que florezca la verdadera justicia y el verdadero derecho.

Por eso, creemos que es hora de que renunciemos a ser aves de granja, lamentablemente ignorantes de la realidad que les espera, para pasar a ser personas libres, gente de a pie de calle que no deba temer decir la verdad y que actúe con el valor y el ejemplo que ahora nos parece que brilla por su ausencia en los políticos.

Creemos que hoy en día cualquiera de nosotros tiene al alcance de su mano la increíble oportunidad de salvar vidas. Sólo hace falta unirse y apoyar a cualquiera de los grupos pro-vida que más hace por las madres en apuros y sus bebés en su impagable labor asistencial.

Pero también somos conscientes de que para acabar con las leyes del aborto son necesarias extensas y contínuas de educación pública que muestren lo que la industria del aborto trata de ocultar bajo la alfombra: paradójicamente el mismo producto que ellos venden, que es el aborto. Conocemos casos de personas que dijeron: “Estaba a favor del aborto hasta que ví uno”, pero ningún caso de alguien que dijera: “Estaba en contra del aborto hasta que ví uno”. Las imágenes del aborto proporcionan las evidencias de tanto la maravillosa y clara humanidad del bebé no nacido como del horror indescriptible del aborto. Creemos que la verdad no está para ser ocultada bajo la alfombra, sino para ponerla en lo más alto para que pueda salir a la luz, convirtiéndose así en luz para las personas y evitando que la sociedad española se convierta en una masa ignorante fácilmente manipulable por políticos sin escrúpulos.